Hace años un amigo sueco (Ola, que es nombre) nos habló de Henning Mankell, un escritor de novela negra que según nos contó era el escritor más famoso en aquellos tiempos en Suecia. Cuando por curiosidad compré un par de títulos de Mankell, protagonizados por el gran Wallander , no sabía la que se nos venía encima. Una serie de novelas que enganchan desde la primera página : Asesinos sin rostro, Los perros de Riga, La leona Blanca, El hombre sonriente, La falsa pista, La quinta mujer, Pisando los talones, Cortafuegos, La pirámide y Antes de que hiele . Su última novela se titula El chino ( sin Wallander), con un inicio espectacular, un lobo hambriento moviéndose entre la nieve, aunque son los hombres los que se comportan como fieras, y de fondo la China contemporánea, su transición a una economía de mercado y su política de expansión en Africa.

Cortafuegos

La quinta mujer
Más adelante llegó Milleniun de Stieg Larsson que arrasó y arrasa en las librerías y Bibliotecas. Y Milleninum tiene algo de Mankell. Leo hoy en el Diario Montañes (8 de jun 2009) en un artículo dedicado a la literatura de los países nórdicos (su año en la Fería del Libro de Madrid, dice) que esta literatura desata pasiones entre los lectores. «La clave del éxito no reside en la novela negra, sino en unos escritores que saben como pocos adentrarse en las miserias sociales globales de forma directa, amena y poética». «Las miserias globales», da que pensar lo tristes que son estos suecos de las novelas, lo mal que lo pasan, ¿suecos angustiados? ¿suecos de Suecia?, pues si, y parece una constante en todos estos autores.

Pipi Lagstrum

Lisbeth Salander
Y es que Lisbeth, tiene mucho de Pipi: casi huérfanas, rebeldes, perseguidas por maestros, policías y maleantes, pero con buenos amigos y no tan indefensas como parecen. Larsson hace una referencia a Pipi cuando Lisbeth usa como seudónimo (vol.2) V. Kulla: Villa Villerkula, «Maldita Pipi Calzaslargas..» piensa Mikael en la página siguiente. Los de mi generación nos criamos con Pipi Langstrum o Calzas Largas , quizás por eso a muchos nos gustan tanto estos autores. No quisiera olvidarme de Bergman, el otro gran referente sueco para nuestra generacion, la anterior y quizas las venideras, director de obras maestras como El séptimo sello , y éste si genio indiscutible para la mayoría de críticos y público.

Fotograma de la película 'El séptimo sello'
Dice el artículo ya citado del DM que animados los editores por el éxito llega una nueva oleada de literatura nórdica. litertura y cine, como Déjame Entrar dirigida por Tomas Alfredson y basada en la película homónima de John Ajvide Lindqvist, «un peliculón» leo en una entrada anónima de google y «estupenda película» dice Lorenzo Silva en un artículo similar sobre la pujante cultura sueca. Y vienen otros, más novela negra de Camila Lackberg –La princesa de hielo– , Jean Lpidus –Trilogía de Estocolmo– y Maj Sjöwall y Per Wahlöö – El policía que rie, todos muy tristes.

Déjame entrar
Tack för Treton bollar Ola.
junio 10, 2009 at 1:27 pm
Al hablar en vuestro post de la tristeza de estos novelistas y cineastas suecos, me he acordado de la infinita tristeza reflejada en las películas del finlandés Aki Kaurismäki, otro triste nórdico.
Muy bonito vuestro post.
junio 10, 2009 at 2:03 pm
Gracias Angela. Me gusta mucho Kaurismäki, que es triste pero tiene un sentido del humor muy peculiar. Me llama la antención el contraste con lo aparetemente afortunada y feliz que es esta gente. Tendrá que ver con los inviernos
junio 12, 2009 at 7:48 pm
Siempre os adelantáis
http://www.elpais.com/articulo/cultura/exito/serie/llego/frio/elpepucul/20090612elpepicul_1/Tes
junio 15, 2009 at 2:19 pm
Más artículos frescos: La vida secreta de Stieg Larsson. Muy interesante
http://www.elpais.com/articulo/cultura/Historia/secreta/Stieg/Larsson/elpepucul/20090614elpepicul_1/Tes
julio 5, 2010 at 8:53 am
La oscuridad y el clima necesariamente tienen efecto sobre el humor y el ánimo. De hecho, conocí una vez un diplomático italiano que estuvo en Suecia y me dijo: «En Estocolmo, hay que andar por el medio de la calle, para evitar que te caigan encima los tipos que se tiran de los edificios»
julio 19, 2010 at 10:06 am
Pues Mankell y S Larsson son la alegría de la huerta comparados con Asa Larsson, la novelista sueca que se está hinchando a vender novelas en España. Suecia profunda inquietante, he visto películas de zombies más alegres